miércoles, 30 de abril de 2008

Manifiesto del 1º de Mayo

Soberanía, independencia y democracia plenas, solo con la revolución y el socialismo

Trabajadores, Trabajadoras

El Ecuador vive momentos trascendentales, el trabajo de la Asamblea Constituyente ha posibilitado que se abra un debate en la sociedad alrededor de aspectos básicos para el futuro del país, produciéndose un alineamiento de los sectores que queremos el cambio, por un lado, y aquellos que pugnan por mantener las cosas como han sido hasta el momento. La confrontación política es aguda y la movilización social levanta las banderas políticas más progresistas.


Lo que ahora sucede es la continuación de la lucha que por años se ha expresado entre quienes combatimos por un país soberano, libre de la dominación y dependencia extranjera, frente a quienes apadrinan el sometimiento al imperialismo; entre los que defienden este sistema de explotación capitalista y los que luchamos por la libertad, la democracia, el socialismo.

Están nítidas las posiciones de los que pretenden mantener la presencia de tropas yanquis en nuestro territorio, que los recursos naturales continúen siendo explotados y aprovechados por empresas extranjeras, o, que se mantengan las formas esclavizantes de explotación capitalista como la tercerización e intermediación laboral. Pero en contraparte, también se observa a quienes están por una política soberana, progresista, que quieren un Ecuador que entierre al neoliberalismo y sus manifestaciones en la política laboral, educativa, social en general.

El trabajo de la Asamblea Constituyente avanza y, en lo fundamental, cubre las expectativas básicas de los trabajadores y los pueblos del Ecuador. En su obra final debe recoger las aspiraciones políticas de todos los pueblos del Ecuador como:

· El reconocimiento del Ecuador como país plurinacional, pluricultural y multiétnico;
· El carácter laico del Estado;
· Un país auténticamente soberano, sin tropas extranjeras en su territorio;
· Un sistema de participación popular en la toma de decisiones trascendentales en la vida del país y de rendición de cuentas obligatoria para todos los funcionarios de elección popular;
· Un régimen laboral que suprima las formas esclavizantes de trabajo;
· Los derechos a la libre organización y movilización, al reclamo y a la huelga de los trabajadores;
· El voto para los integrantes de las Fuerzas Armadas y la Policía y el voto facultativo a los jóvenes desde los 16 años de edad;
· Seguridad social bajo los principios de obligatoriedad, solidaridad y universalidad, con un IESS autónomo dirigido por los afiliados;
· Garantizar la salud y la educación gratuita en todos los niveles;
· La atribución exclusiva del Estado para la explotación de los recursos naturales;

Rafael Correa, desde el inicio de su gestión, ha dado muestras de su compromiso por llevar adelante un proyecto de cambio, lo cual respaldamos. Frente a la criminal invasión a nuestro territorio, perpetrada por el fascistoide presidente colombiano Álvaro Uribe, mantuvo una posición digna y soberana como lo hizo antes frente a la intromisión de los funcionarios del Bando Mundial y del FMI en nuestro país; y lo ha vuelto a sostener al denunciar la infiltración de la CIA en las FFAA ecuatorianas. La actitud patriótica de Correa y la consecuencia con esa política mostrada en la ONU por los gobiernos de Venezuela, Nicaragua y otros, propinó una derrota político-diplomática a Uribe y a Bush que hicieron todo lo posible por justificar la masacre de Angostura. La derecha ecuatoriana (PSC, PSP, DP, las Cámaras de la Producción y los grandes medios de comunicación) se hizo eco del discurso de Bush y Uribe para enfrentar al gobierno, en una nueva demostración de su servilismo al imperialismo y actitud antipatriótica.

Esa conducta de la derecha, y el propósito de principalizar temas que no son motivo del debate en la Asamblea, forman parte de su estrategia de cara al referéndum aprobatorio de la nueva Constitución, en el que la derecha y el imperialismo impulsarán el voto a favor del NO, es decir, en contra del cambio.

La conflictividad política está extendida en todo el continente y el mundo. En todo lado los trabajadores y los pueblos luchan por poner fin a la dominación del sistema capitalista-imperialista. Éste muestra sus debilidades y dificultades en todo sentido. La recesión económica que afecta a los Estados Unidos y amenaza arrastrar a todo el planeta, expresa la magnitud de la crisis que embarga al sistema por su propia naturaleza; la ONU advierte de levantamientos sociales porque en todo el mundo se incrementan los precios de los alimentos y crece el hambre. La crisis del capitalismo no podrá ser superada si no es con el triunfo de la revolución social del proletariado, con la victoria del socialismo.

Nuestro Partido levanta esas banderas. El momento político que vive el país es muy importante; sectores de la burguesía han sido golpeados por algunas medidas tomadas, como la Ley de Equidad Tributaria o la que pone fin a la tercerización e intermediación laboral; sin embargo ello no pondrá fin al sistema de explotación en el que vivimos. Mientras perviva la propiedad privada sobre los medios de producción, subsistirá la explotación y con ella el hambre, el atraso. Luchamos por poner fin a la dominación de la burguesía y el imperialismo con el triunfo de la revolución y la instauración del poder de los trabajadores.

Con motivo de este primero de mayo, fecha emblemática de los proletarios de todo el mundo, expresamos nuestra solidaridad con sus luchas en donde estas se expresen. Nuestra condición internacionalista nos hace sentirlas como nuestras, porque juntos golpeamos a nuestros enemigos comunes: la burguesía y el imperialismo. Sabemos que más temprano que tarde, las rojas banderas del proletariado mundial cubrirán los cinco continentes.

Por el triunfo de la revolución proletaria mundial y el socialismo

Comité Central
Partido Comunista Marxista Leninista del Ecuador

1 de mayo 2008

miércoles, 23 de abril de 2008

EL ROCK ECUATORIANO...













Emerge rebelde y contestario ante la tragedia

En medio del dolor que enluta a muchas familias ecuatorianas, a consecuencia del voraz incendio en la discoteca “The Factory”, al sur de Quito, cabe hacer unas apreciaciones del movimiento roquero en el Ecuador con sus características underground, rebelde y contestatario.

Como muestra de una cultura anti sistema el rock y sus distintas corrientes (Heavy, Death, Black, etc), enfoca su identidad en contra de la opresión cultural y trata de transgredirlo a toda costa. Mediante sus líricas y música eleva su irreverencia. En medio del siniestro afloran los siguientes elementos:

· El acceso a espacios para generar cultura está vedado para medio mundo, se ha elitizado el acceso al teatro, cine, conciertos y la recreación en general. Con equivocadas políticas municipales y estatales no se permite desarrollar a todo un contingente humano ávido de expresar sus muestras o producciones artísticas.
· Escasean los espacios donde se pueda desarrollar estas muestras para todas las culturas urbanas, arriendos inalcanzables por que esos sitios en vez de promocionar el arte el deporte y cultura se han hecho sitios de lucro; seguridad y calidad se ven disminuidas para abaratar costos y un evento rokero tiene que verse forzado a realizarse en tugurios sin ninguna garantía.
· La seguridad mostró su lado sombrío, con desdén nos enteramos que para cada concierto organizado, garantizar la presencia de la Policía costaba USD 8 por casco, y USD 10 por cada miembro de la “Defensa Civil”, la seguridad de los asistentes depende de que tan bien le pueda ir al organizador del evento para gastarse unos sucres en resguardo.
· El control por los organismos municipales han demostrado su total incapacidad en la inspección de lugares de recreación pública. La planteada renuncia del alcalde de Quito, Paco Moncayo, evidenciaba esa incapacidad de prevención, que ya lo demostró con el hundimiento de parte de la autopista en el sector de “El Trébol”. Ahora es necesario que el Municipio asuma su responsabilidad con los fallecidos y los familiares de los sobrevivientes y establezca las indemnizaciones en cada caso.


Esta tragedia ha permitido observar como el capitalismo hipócrita, manipulando mediante el conservadurismo y la ignorancia de los medios de información pública, justifica desfachatadamente la explotación de los trabajadores y a personas como el industrial textil antipatria Mauricio Pinto, en cambio condena a todo un conjunto social de melenas al viento, amante de una forma de vida que incluye un tipo de música que denuncia la exclusión, la dominación imperialista y también le canta al amor con una sensibilidad propia. Son seres como todo el mundo, activistas y luchadores sociales , padres y madres de familia, hijos, tias, etc., señalados como peligrosos, de igual manera que el movimiento insurgente, lo único que les diferencia es su gusto musical, sus ganas de implantar una sociedad mas justa, incluyente y su inclaudicable determinación de combatir el sistema y la opresión imperialista.

lunes, 21 de abril de 2008

Caraballo en libertad


Tras 14 años de prisión, Francisco Caraballo ha sido puesto en libertad


El Comité Coordinador de la Conferencia de Partidos y Organizaciones Marxista-Leninistas, (CIPOML) comunica con emoción y alegría revolucionaria, la puesta en libertad condicional, el pasado 18 de abril, de nuestro querido y respetado camarada Francisco Caraballo.
Caraballo, de 72 años de edad, ha pasado los catorce últimos en una prisión de alta seguridad. En todo momento mantuvo su dignidad y firmeza de revolucionario, de comunista consecuente. Jamás flaqueó su ánimo ni se dejo abatir por la adversidad, pese a las difíciles condiciones en que se encontraba.
Hacemos nuestras las palabras del Comité Ejecutivo Central del Partido Comunista de Colombia (m-l):
«…la libertad condicional que tiene el camarada Caraballo es un triunfo de la solidaridad internacionalista, de la CIPOML, de la izquierda y de las fuerzas democráticas de Colombia y del mundo.
(…) debemos seguir la lucha para que cese la condicional de la libertad del camarada Caraballo, y salgan de las mazmorras del Estado que encabeza Álvaro Uribe los centenares de presos políticos y prisioneros de guerra.»
Manifestamos nuestra solidaridad y fraternidad a Francisco Caraballo, su esposa e hijos, así como al Partido hermano de Colombia, y las fuerzas democráticas y populares del país hermano.
¡Viva el internacionalismo proletario!
Comité Coordinador
Conferencia de Partidos y Organizaciones Marxista-Leninistas

Los nexos de Uribe con narcos y paramilitares

En una busqueda por la Web encontramos mas pruebas de la relacion de Uribe con los paramilitares, narcotraficantes y la oligarquia colombiana, les dejamos unos link donde pueden verificar algunos datos oscuros del Dr. Varito (alias Alavaro Uribe)



Don VARITO CORLEONE

CARTELES DE LA DROGA PROTEGENA URIBE

CUANDO SE SALVO LA CLASE POLITICA COLOMBIANA

martes, 15 de abril de 2008

El socialismo del siglo XXI, nueva teorización de viejas ideas antimarxistas


La simpatía que el proceso político venezolano tiene entre los pueblos de Latinoamérica y la adhesión pública que Hugo Chávez hizo al denominado Socialismo del Siglo XXI ha llevado a ciertos sectores de trabajadores y el pueblo, no solo en nuestro país, a pensar que esa es una alternativa revolucionaria frente al oprobioso sistema capitalista. Inclusive, en nuestro país, Rafael Correa ha dicho ser partidario de esa propuesta que, más allá de su denominación, su contenido tiene poca difusión.

No sorprende que esto último se produzca, puesto que la versión que uno u otro defensor del SS21 tiene sobre dicha propuesta difiere, las interpretaciones son variadas, aunque coincidentes en un aspecto: en esencia son antimarxista- leninistas.
Heinz Dieterich es reconocido como el ideólogo del SS21, más aún, el mismo se autoproclama como tal, aunque a la hora de revisar su libro “El socialismo del siglo XXI”, resulta que quien tiene el crédito de haber desarrollado la base de su propuesta económica, la denominada “economía planificada de equivalencias” no es Dieterich, sino Arno Peters. De las ocho páginas que en su libro destina para el tema mencionado, siete corresponden íntegramente al fundamento de Peters.

En la Revista Política, edición número 23, nuestro Partido publicó un artículo al respecto, titulado “El socialismo del siglo XXI, nueva teorización de viejas ideas antimarxistas”, escrito por Alejandro Ríos, del que ahora reproducimos algunas partes. No todos los subtítulos de este material corresponden al artículo original.

Sin afectar la propiedad privada, no hay socialismo

El sui géneris socialismo de Dieterich se descubre al leer un ‘texto de su autoría (que) invoca a superar ‘el dogmatismo del discurso de los años treinta que confunde el problema del socialismo con el problema de la forma de la propiedad…’ (subrayado nuestro). De ello se desprende dos elementos: a) que el socialismo sería resultado de la adopción de medidas de carácter super estructurales y no de medidas aplicadas en la base de la sociedad: la estructura económica; y, b) como consecuencia de aquello, que el socialismo es posible construirlo en el marco del capitalismo.
… ¿Puede concebirse un socialismo que respete la propiedad de la burguesía, y por ende los instrumentos en los que se apoya para la acumulación de sus riquezas vía explotación a la clase obrera?
El socialismo del señor Dieterich, en los hechos, defiende la permanencia de la burguesía –y con ella el capital privado local e internacional, aunque manifieste lo contrario-, no en vano propugna la instauración de un “estado no-clasista”, que nos recuerda la vieja tesis del gobierno de todo el pueblo, con el que los revisionistas soviéticos llevaron a la reinstauración del capitalismo en la ex URSS. Inspirado en ese pensamiento, Hugo Chávez sostiene que propugna un socialismo “que se basa en la solidaridad, en la fraternidad, en el amor, en la libertad y en la igualdad[1]”, caracterización bastante vaga, que no hace diferencia de los preceptos levantados en la revolución francesa de 1789: liberté, egalité, et fraternité. Sí ha sido preciso, en cambio, en señalar que busca “un socialismo que no excluya a la empresa privada”[2]
… No puede haber construcción del socialismo si la propiedad privada sobre los medios de producción no es sustituida por la propiedad social y si no se suprime toda forma de explotación del hombre por el hombre. Pero hay que advertir que –a diferencia de formaciones económicas pre capitalistas, en las que el nuevo tipo de economía va madurando en las entrañas del modo de producción anterior-, la economía socialista no puede surgir en las entrañas de la sociedad burguesa, por lo que la vía revolucionaria es la única que conduce al socialismo, y esa vía es la de expropiar a los expropiadores, como señalaba Carlos Marx.’

¿Socialismo o desarrollismo keynesiano?

La distancia entre el marxismo y socialdemocratismo presentado Dieterich y compañía es enorme. ‘Según éste, “la vía para salir del subdesarrollo es la política desarrollista… (que) se mantiene dentro de la economía de mercado y en el marco de la superestructura del Estado burgués”[3], lo que encierra un elemento político sumamente peligroso, porque eso significaría que la clase obrera y los pueblos deben abandonar la lucha por la conquista del poder y hacer suyas la exigencia de retornar al Estado de bienestar, impulsado seis décadas atrás por la burguesía como mecanismo de acumulación y desarrollo capitalistas para enfrentar la crisis que en ese momento carcomía al sistema y como medida política para hacer frente a un floreciente socialismo que atraía la atención de las masas.
Esa conducta política a su vez demandaría el apoyo de las clases trabajadoras a las burguesías criollas en la ejecución de su programa, hasta alcanzar el desarrollo que permita avanzar al socialismo, sobre la base de una alianza estratégico republicana entre los pueblos y los gobiernos[4]. Según Dieterich solo países como Estados Unidos, China o Japón estarían en condiciones de avanzar hacia el socialismo, el resto deberíamos conformarnos con tener un Estado benefactor y una burguesía que lo maneje rumbo al desarrollo.
En agosto de 2006, Yásser Gómez (de la Revista Mariátegui de Perú) entrevistó a Dieterich respecto de la salida frente al neoliberalismo, y esta fue la respuesta: “La salida estratégica al neoliberalismo es, por supuesto, el socialismo, es decir una civilización post capitalista, pero en estos momentos tu no tienes condiciones para hacer el socialismo, porque en primer lugar no tienes el proyecto histórico del nuevo socialismo divulgado masivamente, … si no tienes la teoría divulgada entre la gente, si no tienes movimientos de masas ni vanguardias para implementarla, será una quimera hablar del socialismo como una alternativa al capitalismo neoliberal. La alternativa inmediata es el keynesianismo, el capitalismo desarrollista de Estado. (el subrayado es nuestro) …se tienen que combinar los dos elementos, porque los campesinos, los desempleados quieren una respuesta inmediata y no puede ser el socialismo la respuesta inmediata. Se tienen que vincular los dos proyectos históricos: el keynesianismo y el Socialismo del Siglo XXI”. Los comentarios sobran…’

La vía al socialismo es la economía mixta (¿?)

El periodista José Luis Carrillo publicó en Aporrea.org una entrevista con Dieterich cuyo título es muy decidor: "Economía mixta es la vía al socialismo del siglo XXI”; de acuerdo a esa nota y por boca de Carrillo, ‘Dieterich está convencido de que estatizar la propiedad privada no lleva al socialismo, porque "si la propiedad del Estado fuese socialismo, ya con (el rey) Carlos V tendríamos socialismo en América Latina, porque cuando llega la Corona Española a América, toda la propiedad de la tierra, el subsuelo y lo que está arriba es patrimonio del rey, pero eso era feudalismo, no socialismo. La única vía posible es una economía mixta, que tendría tres sujetos, el Estado, la empresa privada y la propiedad social, como cooperativa" sostiene Dieterich.
… La propiedad estatal por sí no es sinónimo de socialismo, y efectivamente existió en el feudalismo y existe en el capitalismo; pero “olvida” señalar quiénes, qué clases sociales se encuentran al frente del Estado en esas sociedades. En una sociedad en la que los trabajadores se encuentran en el poder, la propiedad estatal no tiene similitud con la existente en el marco del capitalismo, de la que la burguesía y el capital financiero son beneficiarios.
Volvamos a las últimas líneas del texto citado anteriormente y encontraremos que Dieterich es partidario de “una economía mixta con tres sujetos, el Estado, la empresa privada y la propiedad social…” como la vía para ir al socialismo, ubicándolo, en los hechos, como defensor de la propiedad privada.
En ese “socialismo” el papel de la empresa privada estaría condicionado, ni más ni menos, que por la eficiencia, por “la capacidad de administración. Si un ente administra adecuadamente un bien –sostiene Dieterich-no tienes realmente motivo para quitarle la propiedad o posesión, si abusa es otro asunto. Yo asumiría una visión funcional”. Vaya socialismo este, en el que los explotadores, los responsables de las miserables condiciones de vida de los trabajadores y los pueblos se convierten en redentores, gracias a su capacidad de gestión administrativa, olvidando las infranqueables barreras de clase que ubican en posiciones contrapuestas a la clase obrera y clases trabajadoras, por un lado, y la burguesía y el imperialismo, en otro.’

La transición al socialismo

‘El socialismo y el período de transición del capitalismo al socialismo tienen diferencias cualitativas. Hasta lograr la afirmación de la propiedad social y la eliminación de la propiedad privada sobre los medios de producción, habrá de tomarse medias encaminadas a reconstituir las fuerzas productivas de la sociedad. …
En este período se aplican todas las medidas para liquidar a la burguesía arrancándole poco a poco el capital y centralizando los instrumentos de producción en manos del Estado, y su naturaleza y duración dependerá de las condiciones particulares de cada país.
Eso significa que, en un inicio junto a la propiedad estatal convivirán y se respetarán: a) la pequeña propiedad privada (pequeña producción mercantil generada por campesinos y artesanos); b) elementos de un capitalismo de Estado, surgido de las concesiones y convenios con capitalistas en sectores donde el nuevo Estado no tiene capacidad tecnológica y científica para desarrollar las fuerzas productivas. Pero esto se dará transitoriamente y en el marco de un sistema nuevo, distinto cualitativamente, porque la clase obrera cuenta con el poder en sus manos y ha pasado de ser clase dominada a clase dominante, un Estado en el que se ejerce la dictadura del proletariado y todas las actividades están orientadas a aplastar los vestigios de capitalismo y no, como sostiene Dieterich, a convivir con la burguesía en un Estado no clasista.
Puede parecer que no hay diferencia entre los dos planteamientos en cuanto a la existencia de diversas formas de propiedad, pero el contraste es radical. El socialismo marxista leninista habla de un período de transición del capitalismo al socialismo en una etapa inicial, pero en condiciones en las que la clase obrera ha tomado el poder en sus manos, creando una circunstancia cualitativamente diferente, en un proceso dirigido por el proletariado y su vanguardia política. Dieterich, en cambio, cuando habla de socialismo o de nuevo proyecto histórico lo hace en términos de las etapas más avanzadas. “La realización del NPH (nuevo proyecto histórico) –asevera- se dará en tres etapas: a) la fase final es la sociedad sin economía de mercado, sin Estado y sin cultura excluyente… b) la fase intermedia será un tiempo de coexistencia de elementos heredados de la sociedad global burguesa y de elementos de la nueva sociedad global postburguesa que servirá para la armonización gradual entre los niveles de desarrollo tecnológico, educativo, económico, político, cultural, militar, etc., de los Estados del Primer Mundo y de los Estados neocoloniales… La primera fase (“c”) de superación del capitalismo global es el tiempo que estamos viviendo… y se caracteriza actualmente por el proceso de constitución de la programática de la sociedad posburguesa…”[5] Nótese que en ningún momento hace referencia a las formas de propiedad de los medios de producción; en la fase superior solo hace referencia a la esfera del mercado y a elementos de la superestructura.’

“Los sujetos de cambio”

‘Bajo este subtítulo Dieterich analiza las fuerzas y el programa del NPH. Aquí, como en la invención del Estado no-clasista, desconoce el papel de vanguardia que le corresponde cumplir a la clase obrera en la conducción del movimiento anticapitalista, al igual que en el proceso de construcción del socialismo. “El sujeto emancipador está conformado por la comunidad de víctimas del capitalismo neoliberal y de todos aquellos que son solidarios con ella. La clase obrera seguirá siendo un destacamento fundamental dentro de esta comunidad de víctimas, pero probablemente no constituirá su fuerza hegemónica.[6]” Esa forma de negar el papel de la clase obrera también se observa en otro aspecto cuando, líneas antes, sostiene que “Tampoco parecen existir las condiciones para la revolución armada en el sentido tradicional…” Ni “tradicional” ni “moderna”, porque en la lógica de los SS21 el uso de la violencia organizada de las masas es incompatible con la transición del capitalismo desarrollista al “socialismo”.
También arremete contra la tesis leninista de la posibilidad de la construcción del socialismo en un solo país; antes lo hizo contra la tesis leninista del eslabón débil, al manifestar que solamente los países con alto desarrollo capitalista (como Estados Unidos, Japón, China…) pueden avanzar al socialismo. En la página 61 encontramos lo siguiente: “Ningún proyecto de cambio nacional profundo puede prosperar en la actualidad, si no se conceptualiza y ejecuta como parte integral del proyecto mundial; debido a que las dependencias de las economías nacionales frente a su entorno son tan profundas que la sobrevivencia de un proyecto no-capitalista dentro del propio espacio nacional se vuelve imposible a mediano plazo. En este sentido, la vieja discusión teórica sobre la posibilidad de construir el socialismo en un sólo país ha sido resuelta por la evolución histórica de las últimas décadas (subrayado nuestro). El capitalismo es un problema sistémico, no local —como el cáncer—; por ende, sólo puede ser vencido con una estrategia de defensa y superación sistémica. Por lo mismo, la praxis democratizadora del sujeto mundial de cambio sólo logrará acumular la fuerza para superar al sistema actual, si conceptualiza la lucha a nivel global y regional, para actuar a nivel nacional y local. (Think global, act local). Jugando a dos aguas, como también lo hace en otros temas, a renglón seguido afirma que “esto no significa que la transformación tenga que hacerse simultáneamente en toda la aldea global, para que sea viable, (…) el nuevo sistema se establece por lo general, en un sector del sistema dominante para luego expandirse gradualmente y convertirse de subsistema o nuevo orden (heterodoxia) en sistema u orden principal (normal): la nueva ortodoxia. Suponemos, que la transición del capitalismo global contemporáneo hacia la democracia mundial participativa seguirá esta misma lógica evolutiva”.
Como en otros aspectos, Dieterich busca aparentar que su propuesta es íntegramente “innovadora”, no obstante recoger –de refilón- elementos reconocidos desde hace muchos años por el movimiento revolucionario. Desde el aparecimiento del Manifiesto Comunista (1848) se formuló la lucha por el socialismo como un fenómeno “sistémico” –para utilizar las palabras de Dieterich- y no local y menos circunstancial, y esa comprensión se resume en la consigna ¡Proletarios de todos los países, Uníos!, y en los esfuerzos inmediatos que se desarrollaron para la organización internacional del proletariado, que dio origen a la Asociación Internacional de Trabajadores, fundada en 1864 y conocida como la Primera Internacional, cuyos primeros documentos reconocían los principios del comunismo científico, pregonaban la necesidad de la unidad nacional e internacional de la clase obrera y el deber de tomar el poder político para lograr su emancipación.
El marxismo siempre ha postulado que la revolución social del proletariado tiene en su contenido una connotación internacional, porque enfrentamos a un sistema y a una clase que ha logrado el dominio mundial, cuya derrota definitiva está condicionada por su eliminación total. Mas, esta revolución mundial, por su forma tiene carácter nacional, es decir, se expresa en los combates que en cada país levanta la clase obrera para derrotar a “su” burguesía y conquistar el poder. De hecho, los efectos de las revoluciones triunfantes locales no se limitan a sus fronteras, tienen implicaciones internacionales al afectar la cadena de dominación del imperialismo, amén de los efectos ideológicos y políticos en el movimiento revolucionario internacional.
En el análisis que Lenin hace del imperialismo, remarca el desarrollo desigual que se opera en los países capitalistas e imperialistas, concluyendo que el sistema se quebrará en su eslabón más débil y no necesariamente en el país con mayor desarrollo de las fuerzas productivas, y la Revolución Rusa de 1917 confirmó aquello.’


“El socialismo de Dieterich, en los hechos, defiende la permanencia de la burguesía –y con ella el capital privado local e internacional, aunque manifieste lo contrario-, no en vano propugna la instauración de un “estado no-clasista”, que nos recuerda la vieja tesis del gobierno de todo el pueblo, con el que los revisionistas soviéticos llevaron a la reinstauración del capitalismo en la ex URSS.”


“El socialismo y el período de transición del capitalismo al socialismo tienen diferencias cualitativas. Hasta lograr la afirmación de la propiedad social y la eliminación de la propiedad privada sobre los medios de producción, habrá de tomarse medias encaminadas a reconstituir las fuerzas productivas de la sociedad…”




[1] II Conferencia de Relaciones Alternativas , Viena, 13 de mayo de 2006 (www.gobiernoenlinea.gob.ve)
[2] Reunión de 12 Jefes de Estado de América del Sur. Venezuela, marzo 2007.
[3] De la intervención de Heinz Dieterich sostenida en la mesa redonda sobre el socialismo del siglo XXI, realizada en Quito el 30 de agosto de 2007 en la Casa de la Cultura Ecuatoriana.
[4] Ibid.
[5] El socialismo del siglo XXI, págs. 58, 59.
[6] Obra analizada, pág. 58.

Colombia, realidad y contradicciones


Colombia una país en el cual las contradicciones propias de la época tienen sus expresiones, un 16%de la población concentra el 80% de la riqueza generada, el ingreso mas bajo que corresponde al 32% de la población mas pobre es menor a un dólar diario contrastando a los dieciocho mil dólares que reciben al día menos del 2% de la población, este país registra la mayor taza de analfabetismo de la región llegando al 20%. Esto demuestra que la premisa marxista de que en imperialismo como etapa superior de desarrollo del capitalismo, el carácter social de la producción se contrapone a la apropiación individual del capital, de más de 43 millones de habitantes el 68% esta bajo condiciones de pobreza.


Este es en realidad el germen que ocasiona un permanente enfrentamiento entre las dos clases sociales, entre quienes quieren sostener el statu quo y de quienes quieren revertir el orden institucionalizado, las variadas expresiones y formas de lucha de los pueblos colombianos en el combate al imperialismo y sus políticas aplicadas por los gobiernos de turno; han desatado un conflicto interno, en torno a que Colombia quieren los colombianos. Estas visiones ideológicas, políticas, organizativas han estado presentes en la cotidianidad dela población, de los cuales sectores avanzados han decidido no ser espectadores y convertirse en protagonistas de los cambios.


La violencia generada desde la propia naturaleza de un estado capitalista, el cual considera a los seres humanos como estadísticas de un desarrollo inequitativo, en el cual la aplicación del modelo neoliberal toma a la vida como sinónimo de índice y mas no de bienestar, ha provocado intensas jornadas en una sociedad donde existe conflictos, conflictos de clase en el cual esta por medio el poder.


En Colombia no solo existe la guerrilla, existe un pueblo que anhela cambios a través de la organización de los diferentes sectores sociales, el descontento es pan diario, la movilización en contra del alto costo de la vida, por acceso democrático a la educación, por estabilidad laboral, la exigencia por la cobertura de seguridad social, por viabilidad, acceso a vivienda, la lucha por la democracia y la participación, entre otras son elementos permanentes en los sectores populares.
La respuesta por parte de la burguesía es la represión, la intolerancia, la desinformación. Los miles de millones de dólares que se han invertido en la guerra interna no benefician a la mayoría de la población. La lucha guerrillera nace como respuesta a la reacción de la derecha, que valiéndose, de la tortura, el asesinato, la intimidación, trata de neutralizar los sueños y la esperanza de millones de seres.

Hoy se habla de humanizar el conflicto, mientras quien trata de mantener las condiciones establecidas es gobierno guerrerista de Uribe, quien al ser el mejor aliado de Bush, ven la solución del conflicto en la intervención, y mas no, en la salida política. Como en toda guerra existen bajas, retenciones, toma de posiciones. Se habla mucho de los retenidos nadie ha dicho de los centenares de presos políticos existentes en las cárceles colombianas, no solo de combatientes guerrilleros, de dirigentes populares, campesinos, estudiantiles que han planteado su inconformidad con las políticas gubernamentales.

Por otro lado las acciones de las llamadas “autodefensas” organizaciones paramilitares que son financiadas como se ha demostrado desde norte América y la casa de Nariño mantienen en zozobra a la población, su poder político, es el poder político de quien dirige el Estado (Uribe Para), en el ultimo periodo 27 congresistas han sido destituidos por vínculos con los paramilitares y un número igual están en etapa de investigación.

Esto demuestra una vez más que los pueblos estan llamados a escoger su destino, los pueblos tienen derecho a su autodeterminación, por lo tanto son responsables para solucionar sus conflictos de la forma que consideren de acuerdo a su realidad.
Para nosotros la lucha de los pueblos no es terrorismo, el terrorismo está implementado desde. BUSH USA URIBE con la finalidad de detener los cambios que en América Latina se avisoran, los cambios hacia el socialismo..

miércoles, 9 de abril de 2008

Flexibilización laboral: Fin a la intermediación, el trabajo por horas y la tercerización laboral


Existe una frase que dice, “las leyes son el reflejo de la voluntad de la clase dominante”; con esa voluntad la burguesía acumula su riqueza sobre la base de mecanismos que sobre explotan la fuerza de trabajo, como la “tercerización laboral” y la no remuneración del excedente del trabajo (plusvalía).

La riqueza acumulada en los bolsillos de los poderosos no tiene origen en el tan cacareado “espíritu emprendedor” del empresario, si no en leyes que evaden o reducen constantemente la remuneración de los trabajadores.

El punto caliente de la relación entre empresarios (dueños de los medios de producción) y clase obrera (dueños de la fuerza de trabajo) son los derechos laborales de los trabajadores, negados constantemente por los primeros. La remuneración es el más importante de todos. La lucha entre estas dos clases sociales ha estado animada a lo largo de la historia en el Ecuador, por la exigencia en la elevación de los salarios o por su reducción.

La burguesía sostiene que no puede pagar mejores salarios por que esto los dejaría sin márgenes de ganancias. Esta es una vil mentira y lo demostramos así: un obrero con su fuerza de trabajo y maquinaria “estandar”, envasa “normalmente” 160 botellas de agua al día. El dueño de la fabrica que quiere elevar su ganancia, probablemente eleva el precio de su producto, hasta que la competencia lo obligue a bajarlos esta vez, muy por debajo del precio de la competencia ¿Cómo eleva el burgués su ganancia? Adivinaron. Introduciendo nueva maquinaria para acelerar el ritmo de trabajo del trabajador. El obrero triplica en 480 botellas al día su producción ¿Se eleva su salario? En absoluto. El dueño en corto tiempo amortiza el costo de la maquinaria y empieza a embolsicarse el rédito del excedente de trabajo no remunerado.

Cuando la innovación tecnológica empieza a ser muy cara y no puede comprar nueva maquinaria, entra en lo que se conoce como el decrecimiento forzoso de la tasa de ganancia. ¿A que mecanismo recurre? Adivinaron. A cuerpos legislativos que le faciliten su insaciable sed de acumulación y concentración de riqueza, el patrono crea leyes laborales antiobreras como la “intermediación, el trabajo por horas y la tercerización”, un oscuro procedimiento en el que una empresa, casi siempre fantasma, contrataba trabajadores para otra empresa, sin que esta última tenga ninguna obligación laboral para los contratados. Resultaba que la tercerizadora les recortaba sus ya miserables sueldos por concepto de comisión y les tenía en el desamparo total.

Así nació la idea de lo que se conoce hoy como “flexibilización laboral”, un amplio paraguas que protege a los empresarios inescrupulosos, que es a su vez un conjunto de medidas y leyes, pensadas por los tecnócratas al servicio del imperialismo, FMI, BM, que fue vendida a gobiernos lacayos como los que tuvo el Ecuador hasta antes de la llegada de Correa, para impedir su organización, hacer retroceder sus derechos y conquistas y mantener sus remuneraciones siempre a la baja, como sucede con un producto que nadie quiere comprar. Todo esto se conoce como el “deterioro de las condiciones de la fuerza de trabajo”, un eufemismo cínico para señalar lo que en verdad debe llamarse como el descarado e inhumano proceso de sobre explotación y deterioro de la vida de la clase obrera y los trabajadores.

Frente a la decisión de la Asamblea Constitucional, de dar fin a las empresas tercerizadoras y a todas las artimañas legales que sobre explotan a la clase obrera, mediante un Mandato Constitucional, los empresarios han puesto el grito en el cielo. Que lo pongan. Los trabajadores deben recuperar sus derechos arrebatados por gobiernos neoliberales como Borja, Febrescordero, Bucaram, Mahuad, Gutiérrez, que aplicaron sin piedad en materia laboral las “sugerencias” del gran patrón norteamericano. El fin de las tercerizadoras es una victoria de la clase obrera.

domingo, 6 de abril de 2008

FESTIVAL POR LA SOBERANÍA, LA LIBERTAD Y EL SOCIALISMO


La juventud universitaria se hizo presente para defender la soberanía ecuatoriana, alrededor de 8.000 jóvenes se dieron cita, al FESTIVAL POR LA SOBERANÍA, LA LIBERTAD Y EL SOCIALISMO, como muestra del espíritu solidario e irreverente que caracteriza a la juventud ecuatoriana, esta fue una muestra de cómo la población ecuatoriana esta unida, y muestra su rechazo a la actitud pro imperialista y guerrerista del gobierno de Álvaro Uribe y su intromisión militar a territorio ecuatoriano que provoco la muerte del comandante Raúl Reyes y cerca de 20 muertos más incluido un compatriota.

El festival contó con la presencia de destacados grupos como: Jayac, Chaucha King, 4 del Altiplano, Canto Vivo, la Vagancia, Cantores del Pueblo, Misil.




jueves, 3 de abril de 2008

Declaración en contra el terrorismo mediatico



Encuentro Latinoamericano contra el Terrorismo Mediático emitió Declaración de Caracas31/03/2008

Caracas, 31 Mar. ABN.- Un llamado a los jefes de Estado de América Latina y El Caribe a incluir el tema del Terrorismo mediático en todas las reuniones y foros internacionales, hicieron los participantes del Encuentro Latinoamericano contra el Terrorismo Mediático mediante la Declaración de Caracas, que se dio a conocer este lunes en rueda de prensa. A continuación transmitimos el texto completo de la Declaración de Caracas: Periodistas, comunicadores y estudiosos de la comunicación de América Latina, El Caribe y Canadá, reunidos en Caracas en este Primer Encuentro Latinoamericano contra el Terrorismo Mediático, denunciamos el uso de la falsificación por las transnacionales informativas como una agresión masiva y permanente contra los pueblos y gobiernos que luchan por la paz, la justicia y la inclusión. El terrorismo mediático es la primera expresión y condición necesaria del terrorismo militar y económico que el Norte industrializado emplea para imponer a la Humanidad su hegemonía imperial y su dominio neocolonial. Como tal, es enemigo de la libertad, de la democracia y de la sociedad abierta y debe ser considerado como la peste de la cultura contemporánea.


A nivel regional el terrorismo mediático utilizado como arma política en el derrocamiento de gobiernos democráticos de países como Guatemala, Argentina, Chile, Brasil, Panamá, Grenada, Haití, Perú, Bolivia, República Dominicana, Ecuador, Uruguay y Venezuela, está siendo empleado hoy para sabotear cualquier acuerdo humanitario o salida política al conflicto colombiano y para regionalizar la guerra en la zona andina.


La actual lucha democrática en Ecuador, Bolivia y Nicaragua, junto a Brasil, Argentina, Uruguay y México, confirma la voluntad política de nuestras sociedades para desbaratar la agresiva y simultánea campaña de difamación de las transnacionales informativas y de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP). Cuba y Venezuela representan con claridad los hitos más vigorosos de esta batalla aún inconclusa.


Por otra parte, estamos obligados a redoblar nuestros esfuerzos ante la dramática situación por la que actualmente atraviesa el periodismo democrático en Perú, Colombia y otras naciones. Este Encuentro Latinoamericano mostró la necesidad de crear la Plataforma Internacional contra el Terrorismo Mediático, que convoca a un nuevo Encuentro a realizarse en un plazo no mayor de dos meses, para lo cual actuará en conjunto con otras organizaciones como la Federación Latinoamericana de Periodistas (FELAP), que en el crecimiento de la conciencia de los pueblos latinoamericanos y caribeños, ha defendido con ejemplaridad el derecho a la verdad y a la divisa que sustenta sus principios: Por un periodismo libre en patrias libres.


Empecinada en criminalizar todas las modalidades de lucha y resistencia popular, so pretexto de una falaz noción de seguridad, la administración fundamentalista de George W. Bush ha sido responsable de la sistemática agresión terrorista de los últimos años contra los medios de comunicación alternativos, populares, comunitarios e incluso algunos empresariales. La información no es una mercancía. Tal como la salud y la educación, la información es un derecho fundamental de los pueblos y debe ser objeto de políticas públicas permanentes.


Convencidos de que esta historia empezó hace 200 años, ratificamos el compromiso de quienes en ella nos precedieron, con el propósito de ajustarnos a un ejercicio ético de nuestra profesión, apegados a los valores de la democracia real y efectiva y a la veracidad que se merece la diversidad de pensamientos, creencias y culturas. No sólo la SIP, sino grupos de choque como Reporteros sin Fronteras, responden a los dictados de Washington en la falsificación de la realidad y la difamación globalizada. En este contexto, la Unión Europea cumple un rol vergonzoso que contradice la heroica lucha de sus pueblos contra el nazi-fascismo.


En la forja de la unidad de los pueblos latinoamericanos y caribeños, los firmantes de esta declaración llamamos a los profesores y estudiantes de comunicación social a considerar al Terrorismo Mediático como uno de los problemas centrales de la Humanidad, convocamos a los periodistas libres a comprometerse a redoblar sus esfuerzos en pos de la paz, el desarrollo integral y la justicia social. En este espíritu, exhortamos a los jefes de Estado de América Latina y El Caribe a incluir el tema del Terrorismo mediático en todas las reuniones y foros internacionales.

Asi Somos